jueves, 16 de agosto de 2012

Taller LOS HALLAZGOS. Isabel Villarreal


Instrucciones para abrazar un árbol

Para abrazar un árbol usted debe seguir las siguientes instrucciones:

1-Sentir la necesidad de hacerlo, constatando la plenitud de su alma en cuanto a la sensibilidad y la capacidad de captar  sensaciones.

2-Espere el día ideal. Este debe ser con mucho sol, algo de viento, cielo despejado y azul en lo posible. Todo esto le permitirá gozar del abrazo.

3- Ponga sus brazos haciendo una cruz con su cuerpo, eleve el rostro y extienda lo que más pueda sus extremidades superiores, tomando conciencia del círculo que se formará cuando la punta de sus dedos derechos toquen los similares izquierdos. Este acto es de suma importancia ya que le permitirá seleccionar correctamente el árbol a abrazar.

4-Elija el árbol observando detenidamente su tronco, el cual no deberá ser muy flacucho para evitar la sensación de estar dando un abracito de morondanga. Tampoco opte por uno muy poderoso que lo deje a medio camino y con la impresión de un abrazo fracasado.
Cuando usted haya seleccionado el árbol, acarícielo y deténgase a establecer un contacto especial con él. Mírelo desde la copa, tratando de meterse en cada hueco que dejan sus hojas, llegue lentamente hasta su pie metido en el suelo, imaginando su eterna quietud. Huélalo, sienta cantar el follaje al son del viento reinante, cierre los ojos y capture su imagen.

5- Cuando su alma lo indique inicie el abrazo, a paso lento  o corra al encuentro. Esta decisión lo indicará el corazón de quien abraza.

6- Envuelva con sus brazos al árbol elegido. Apoye su rostro, su frente y su boca, alternadamente en el tronco y  déjese inundar por la savia que late en su interior.

7- Deje que su alma flote, cierre los ojos y disfrute.

                                                                      Isabel Villarreal

No hay comentarios:

Publicar un comentario